Rymden: el trío noruego que no esperas

Bugge Wesseltoft no necesita presentación. El pianista y productor noruego lleva dejando huella desde principios de la década de 1990, alejándose de la tradición del jazz nórdico asociado a ECM para fundar su propio sello, «Jazzland«, y lanzarse a explorar un futuro para el jazz, en el que además de formas clásicas, conviven sonidos cercanos al deep house, el techno, o el ambient. Publicado en 2003, su disco «New Conception of Jazz» se convertiría en todo un shock para la escena europea y en una influencia clara para toda una generación de jóvenes músicos.

Qué decir del bajista Dan Berglund y del batería Magnus Öström. Ambos formaron parte, junto a Esbjörn Svensson, del que probablemente haya sido el trío europeo jazz más internacional: E.S.T. Sus fans todavía los recuerdan por un estilo que se caracterizaba gran medida, por una apuesta permanente por la experimentación sonora, mostrando un gran interés por la tecnología, el uso de sintetizadores y otros equipos electrónicos.

A nadie le debería de extrañar por lo tanto que tres músicos con una visión similar del jazz y que se han caracterizado por jugar casi siempre al límite, no acabaran juntándose para formar Rymden, un proyecto que nace en 2018 y que como explican en su página oficial, se basa en tres elementos: «composición melancólica y atmosférica, ritmos cargados de dramatismo y jazz virtuosamente interpretado del más alto nivel». 

Como no podía ser de otra forma, en este nuevo grupo encontramos muchos de los elementos que han servido para dar forma tanto a E.S.T como a los sonidos que se asocian a Jazzland y así en sus discos encontramos junto a un jazz de vanguardia, referencias a Bach, elementos de la cultura popular, música de cine, rock, o electrónica.

En el libreto de su primer disco «Reflections and Odysseys» (2019) abundaban más sobre esta idea. Explicaban entonces: «Con la formación de Rymden (que significa ‘espacio’ – como en ‘espacio exterior’ o ‘universo’), se nos presenta una música que es innatamente escandinava en estado de ánimo y actitud. No es el ‘sonido escandinavo’ que uno podría imaginarse: no es música para meditar con vistas a montañas heladas o fiordos tranquilos (¡aunque el oyente es libre de hacerlo!): Es música que refleja todos los aspectos del entorno escandinavo del siglo XXI. Es música llena de dinamismo agreste, técnicas de interpretación extendidas, atmósferas lúgubres o melancólicas. Ofrece sonidos cinematográficos y épicos, dramatismo en cascada, choques y salpicaduras, tensión y liberación. Ofrece riffs melódicos al unísono de alto voltaje; minimalismo inmerso en ricos tapices improvisados, doblaje vocal de melodías y momentos amenazantes». 

A este debut, le seguiría en 2021 «Space Sailors» un disco más maduro y en el que entre otras cosas nos invita a explorar la psicodelia de los años 60 o el punk de los 70 y que los tres, de forma divertida e irónica definen de la siguiente forma: «Si alguna vez te has preguntado qué pasaría si una partitura de Krzysztof Komeda para una película de Polanski chocara con Fugazi, no busques más; si necesitas saber cómo sonaría Chopin escribiendo doom metal, puede que encuentres la respuesta que buscas». 

Pero es en este 2023 y tras algunos EPs y el disco en directo «Live at Umea» cuando llega su proyecto más ambicioso y para el que han contado con la colaboración de la Norwegian Broadcasting Orchestra (KORK): «RYMDEN + KORK». 

Y es que la combinación de una orquesta clásica con el sonido de este trío noruego, aporta un contraste aún mayor a su música, ofreciendo una paleta texturas más amplia. Lo que encontramos en el disco son nuevos arreglos para muchos de los temas más conocidos del grupo, creando de esta forma un tapiz sonoro diferente, a veces más alegre y desenfadado y otras más profundo y serio. Un disco en todo caso que en nuestra opinión se postula para encontrarse entre los más destacados del jazz europeo de este año.

En 2020 los noruegos participaron en el 55 Jazzaldia de San Sebastián. No fue por supuesto el mejor momento. En plena pandemia y con aforos limitados al mínimo, su propuesta maximalista (e incipiente entonces) no acabó de cuajar. Tres años más tarde, comienzan una gira europea que les llevará a países como Holanda, Italia, Austria y crucemos los dedos, también a España. Si tenéis oportunidad de verlos en directo, no os lo perdáis.