Los mejores accesorios para cuidar de tus vinilos

A los aficionados al vinilo les gusta decir que no solo disfrutan de la calidad de la música analógica, sino que disfrutar aún más con el proceso. Y ese proceso no solo incluye colocar el disco en el plato, levantar el brazo y situar la aguja sobre el surco, sino muy especialmente, ocuparse de todos esos detalles que habitualmente se asocian a una mejor reproducción de los discos y la conservación de los mismos durante años en las mejores condiciones.

Si hace unos meses os contábamos cómo limpiar vuestros discos de la mejor forma posible, hoy vamos a dar un paso más y os hablamos de algunos accesorios que os puede interesar tener en casa para mimar aun más a vuestros discos.

Cepillo limpiador de vinilos

La electricidad estática es uno de los grandes enemigos de los amantes de los vinilos. Mientras un disco gira, se acumula una pequeña carga eléctrica que atrae el polvo, lo que puede causar crujidos y chasquidos durante la reproducción. Para algunos esa es la esencia de escuchar música en un formato analógico…pero para el resto, es desde luego un sonido a evitar.

Y es fácil conseguirlo. Por pocos euros podemos hacernos con un cepillo especial para vinilos que no solo “descargará” de electricidad estática nuestro álbum favorito, sino que también eliminará polvo y suciedad acumulada. ¿Cuándo utilizarlo? Desde luego cuando notemos esos chasquidos que interrumpen el sonido, pero algunos expertos recomiendan hacerlo una de cada diez veces que hayamos reproducido el disco de modo que por un lado, este se mantenga “en forma” y por el otro, no “abrasemos” excesivamente el plástico.

Limpiador de aguja

Se han escrito en Internet miles de artículos sobre las mejores agujas, cuáles son apropiadas para qué platos, en qué debemos fijarnos…y aunque eso es desde luego materia para otro artículo en Caravan, hoy nos limitaremos a señalar que todos ellos coinciden en algo muy sencillo: la agua tiene que estar limpia.

No por nada, este elemento esencial en nuestro plato, se encarga de seguir los surcos del disco, ayudando a transformar la señal analógica que recibe en música audible. Como en el caso del disco, si la aguja esta sucia o tiene un exceso de polvo, el sonido distará de ser el mejor. Un limpiador de aguja elimina suavemente los residuos, permitiendo un seguimiento preciso y prolongando la vida útil de la misma. Muchas veces podréis encontrar tanto cepillo de vinilo como de aguja en el mismo kit de limpieza básica.

Calibrador de aguja

Un calibrador de aguja es un dispositivo utilizado para medir con precisión la presión descendente ejercida por la aguja en la superficie del disco de vinilo durante la reproducción. Si comienzas a tomarte en serio tu colección de vinilos, controlar esta presión puede mejorar el rendimiento general de nuestro plato, preservando la calidad del disco y alargando la vida útil de la aguja.

Hay que tener en cuenta que una presión insuficiente puede traducirse en un seguimiento deficiente de los del vinilo, lo que puede causar saltos o incluso, que la aguja se salga de las ranuras. Por otro lado, una fuerza excesiva puede causar un desgaste prematuro tanto del disco como de la aguja.

Es cierto que muchos tocadiscos modernos vienen con una configuración de presión ajustada de fábrica y no requieren de un calibrador de aguja por separado para configurarla. Sin embargo en algunos casos, especialmente con tocadiscos más antiguos o modelos de gama alta, es posible que los usuarios deseen ajustar la fuerza por sí mismos. También, si cambian la cápsula o el cartucho de su tocadiscos, pueden necesitar ajustar la presión de nuevo.

Pesa para vinilos

Debido al calor, la humedad, cómo hayamos almacenado o los discos, o simplemente el paso del tiempo, puede provocar en el acetato ligeras deformaciones que Su afectan a la calidad del sonido. Ua pesa para vinilos corrige estos pequeños cambios presionando suavemente el disco sobre el plato del tocadiscos, reduciendo así el efecto de cualquier deformación y evitando posibles saltos.

Existen diferentes tipos de pesas para vinilos, desde modelos simples y económicos hasta versiones más avanzadas y que cuentan con características adicionales, como niveladores de burbuja incorporados o materiales específicos para amortiguar las vibraciones. Su uso en todo caso es muy sencillo: se coloca directamente sobre el vinilo, cerca del centro del disco, antes de comenzar la reproducción.

Alfombrilla

De los mencionados hasta ahora, la alfombrilla es probablemente el accesorio que nos va a proporcionar más alegrías si tenemos en cuenta lo que cuesta. Y es que la alfombrilla que vamos a colocar entre el plato y el disco tiene una capacidad más que demostrada de mejorar significativamente la calidad del sonido.

Un alfombrilla de calidad minimiza la vibración y la electricidad estática, proporcionando una superficie estable para que el vinilo descanse. Y si queremos gastarnos algo más, una alfombrilla premium (aún así normalmente menos de 50-60 euros), construida en corcho o fieltro, mejoran aún más el rendimiento sonoro y reducen el desgaste general del disco.

Nivelador de burbuja

Un nivelador de burbuja cumple con la función que promete: nivelar el tocadiscos. Mantener el plato en el plano horizontal exacto no solo influye en el rendimiento sonoro, evitando cualquier variación no deseada en el tono, sino que sobre todo ralentiza el desaste tanto de la aguja como del disco.

El usuario ajusta la posición del tocadiscos, ya sea mediante patas ajustables o utilizando una plataforma de nivelación, hasta que la burbuja esté centrada entre las marcas de nivel. Esto indica que el plato está nivelado de manera perfectamente horizontal.

Fundas y cubiertas

Existe la tentación en algunos principiantes de guardar los vinilos nuevos conservando su envoltorio original. Y aunque hay algo de fetichismo en ello, es una práctica únicamente recomendable si nuestra intención es la de no abrir el disco y conservarlo simplemente como un objeto de coleccionismo. Con el paso del tiempo las condiciones ambientales pueden perjudicar este plástico fino, que acaba pegándose a la cubierta, lo que hace que si queremos abrirlo, corramos el riesgo de romper el cartón.

Afortunadamente podemos evitar este desaguisado sin desde el principio contamos con dos materiales tan baratos como fáciles de encontrar: fundas internas y cubiertas externas de calidad. Normalmente están fabricadas en polietileno o polipropileno, protegen los discos de partículas dañinas y garantizan un almacenamiento seguro.