Hace unos meses repasábamos la historia del legendario Cotton Club, ese «estupendo antro» en la que una noche escuchabas a Duke Ellington y la siguiente, encargabas un asesinato. Tan popular o más que ese club de leyenda es el mucho más posh «The Village Vanguard», inaugurado en 1934 por el promotor musical Max Gordon en el Greenwich Village de Nueva York.