Se nota cierta alegría en el ambiente. Porque aunque quedan muchos meses para decir adiós a la pandemia, poco a poco vuelven los conciertos. Os lo contábamos en Caravaning, la newsletter de Caravan Jazz: pese a las dificultades, estamos consiguiendo decir adiós al largo invierno.
Las cosas como son. La bandeja de entrada de nuestro correo electrónico se había convertido en un auténtico erial en 2020. Desde hace unas semanas sin embargo, no para de darnos alegrías, con unas cuantas propuestas del tipo «no me las quiero perder». Una de las últimas que hemos recibido, es una doble cita en este mes de abril con «The Mad Reeds», un quintento madrileño formado en 2018 y que domina como pocos, músicas que van del blues al swamp, pasando por el rock and roll y el country.
El grupo vuelve a los escenarios madrileños el sábado 17 en el Teatro Tribueñe y el jueves 29 en la Sala Rockville y los que quieran disfrutar de un grupo que bebe de la música americana de raíz, harán bien en apuntarse ambas fechas en la agenda.
La banda está compuesta por Emilio Arsuaga a la voz, armónica y guitarra; Marino Orejana al bajo; Carlos Arsuaga a la batería; Javier Díaz Castillo al piano y César Crespo a la guitarra. Hablamos de músicos que tienen más de 20 años de experiencia en estos géneros dentro de los circuitos nacionales e internacionales y que llevan a los escenarios un repertorio tan rico y variado como la propia música de Lousiana.
El directo de The Mad Reeds es una verdadera explosión de sonidos auténticos, llenos de personalidad, basados en la obra de sus ídolos clásicos como Jerry Lee Lewis, Buck Owens, Little Walter, Fats Domino, Cookie and the Cupcakes o Smiley Lewis. Para ambas ocasiones se acompañan además de invitados de lujo, como los artistas Greg Izor e Isabel Urzáiz, por no hablar de nuestra compañera y estupenda cantante de blues, Itziar Yagüe.
The Mad Reeds publicó su primer disco en 2019, I’m here to stay, trabajo en el que queda fielmente plasmada la influencia sureña del grupo en la instrumentación, arreglos e interpretación de los temas. Emilio Arsuaga firma cuatro de las once canciones, que se mueven entre homenajes a ídolos como Jimmy Reed o Johnny Sansone (además de a otros que ya hemos citado) y que se cierra con un precioso tema original, “Thank you, so long” homenaje a Lazy Lester, el bluesman al que los miembros de The Mad Reeds acompañaban en sus giras europeas y que falleció un año antes.
Yo aún me froto los ojos al descubrir que pese a todos los palos que les ha dado esta maldita pandemia, los músicos resisten: será verdad eso de que están hechos de otra pasta…y tengo claro que al menos en uno de esos dos conciertos, estaré ahí para comprobarlo.